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“Dona nobis pacemâ€


La vida era una paulatina conquista de un corazón más generoso y menos rencoroso. La vida era quizás sólo eso, ir perdiendo en nuestros bolsillos hierro por los agujeros de la comprensión y la compasión. Reconozco el inicial enfado, reconozco que he caminado días en pos de una calma extraviada hasta poder por fin exhibir hoy esta réplica amistosa y definitiva.

Me ha costado enterrar mi propio hacha de guerra, pero finalmente lo he conseguido. La calma ha ido apoderándose de mi interior y de mis letras. Ahora sí le he quitado todo el hierro al artículo.

La noche en la caravana me reveló nuevas claves. Os comparto estas letras conciliadoras paridas hoy al alba de Velouriz y que invita al mutuo acercamiento. Respiro por fin con la conciencia tranquila.

"DONA NOBIS PACEM"

“Dona nobis pacem†ha sido el “mantram†que más ha estado en nuestros labios a lo largo del Foro Espiritual recién concluido en Estella. El mundo la necesita, nosotros y nosotras por supuesto también. Quien suscribe no es ningún “adalid de la pazâ€, tal como refiere Patxi Gerriko en el crítico artículo que me ha dirigido en las páginas de este periódico. Personalmente necesito esa paz como el que más. Aún no termina de instalarse en mi interior. La escasa que consigo reunir se me escapa a menudo. La paz me puede mermar, Patxi, por ejemplo, cuando leo vuestras letras en el “Noticiasâ€. Pido todos los días por alcanzar esa paz que no turba ningún desafío, ninguna letra impresa y tan a la vista.

“Dona nobis pacem et dona nobis veritas…â€, porque igualmente necesitamos la verdad para caminar hacia nuestros ideales, en importante medida, compartidos. Sí “deseo escucharâ€. Nuestras comunicaciones escritas revelan que me presté, dejando todos los preparativos de nuestro Foro, a acudir a Pamplona y hablar con vosotros sobre la presencia de la representante judía en nuestro encuentro. Declinasteis la invitación. Estaba dispuesto a coger coche y hacer 120 kms. para reunirme.

En honor a esa misma verdad convendría reconsiderar la campaña que habéis lanzado para que el Foro no saliera adelante. Prima un esfuerzo de comprendernos mutuamente que no de boicotearnos. Hay otra suerte de internacionalismo que no tira tanto de pancarta y que se asienta en lo profundo de cada vez más corazones, un genuino sentimiento de hermandad que no busca desesperadamente enemigos; que observa la ignorancia como la base de nuestra separación, de la terrible violencia que aún sacude la condición humana.

Honramos, como no podría ser de otra forma, vuestro sentimiento de humanidad, vuestro anhelo solidario con las víctimas de la injustificable masacre de la población civil gazatí, pero ello no nos empuje a seguir confrontando a diestro y siniestro. Nosotros en Estella y su Foro Espiritual encendemos una vela, llamamos a los credos, levantamos un árbol de la paz y soñamos juntos en un mundo nuevo en el que todos tengamos cabida, sobre todo y ante todo quienes han perdido bajo el salvaje misil familiares queridos; sobre todo y ante todo quienes han visto su casa reducida a escombros, quienes habitan en una franja-prisión inmisericordemente atacada.

Tenemos demasiadas cosas en común como para tirarnos los trastos a la cabeza, amigo Patxi. Podamos encontrarnos a la vuelta de esta batalla sin sentido. El Foro Espiritual de Estella pueda desplegar sin impedimentos todo su potencial de paz, pues de esa forma también gana el mundo, gana la paz, ganamos un poquito todos. Quien ha despertado el enfado de vuestro movimiento y otros ha sido una mujer enferma con serios problemas de salud que cogió sola el tren en Barcelona para presentarse en el Foro que trata de reunir en Estella a los diferentes Caminos. Su intervención giró en torno a dos cuestiones. La primera su enfermedad, el COVID persistente que ha contraído y que la ha alejado de toda actividad laboral y la segunda su fe. Nos contaba, entre otras anécdotas, cómo anhela poder tirarse por el suelo de su hogar y volver a jugar con su niña. Narró igualmente cómo la enfermedad la ha empujado a abrazar recientemente la religión judía. La había heredado de sus padres, pero esa fe permanecía durmiente. En ningún momento nombró al gobierno israelí, ni mucho menos trató de “blanquearloâ€. Ella misma echó en falta la presencia del representante musulmán retirado.

A menudo necesitamos una diana o un contrincante para satisfacer nuestro ánimo de confrontación. A todos nos horrorizan los inmisericordes bombardeos israelís. Esa barbarie nos indigna por igual, pero deberemos ser cuidadosos a la hora de atribuir responsabilidades. A la causa “internacionalista†le sobra la acusación gratuita y la verdad trastocada.

Al fin y al cabo, todos somos internacionalistas. Nadie tiene su exclusiva y conviene respetar todas las formas de vivir ese internacionalismo; nadie debería intentar perjudicar otros foros cuyo internacionalismo no se aviene con el nuestro. Nosotros creemos firmemente en una hermandad humana que aboga por la superación del paradigma de la confrontación, por el fin de toda espiral de violencia, que apuesta por el respeto de los derechos humanos y de la vida, que condena su conculcación venga de donde venga. Nuestra condena no está sujeta a ningún condicionamiento ideológico.

El Foro ha florecido y lo ha hecho seguramente con mayor esplendor y perfume. Las dificultades han generado una unión, sobre todo en el espacio de los “Diálogosâ€, que no habíamos conocido en ediciones anteriores. Los obstáculos han reforzado nuestras convicciones. El contrario, el divergente era quizás el convidado más oportuno en el círculo del diálogo, en toda esfera y lugar, siempre imprescindible. Estáis cordialmente invitados dentro de dos años, a orillas del Ega, al círculo de hermandad que no conoce frontera alguna.

* Toda la información del Foro Espiritual en:
www.foroespiritual.org


Velouriz 19 de Julio de 2024
www.velouriz.org

 
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