El silencio también puede pecar. Escribir estas letras no nos resta corazón, una lógica madura y superior está llamada a imponerse también en nuestros hábitos cotidianos. Hay principios que pueden semejar duros, pero que es preciso con tiento y sensibilidad empezar abiertamente a compartir. Con infinito respeto para con los familiares y amigos del finado... Una renovada fe se va sedimentando en sectores cada vez más amplios de la ciudadanÃa. A la luz de una ciencia avanzada, de unas tradiciones milenarias, de una lógica primordial, no serÃamos sólo cuerpos. Fundamentalmente serÃamos espÃritu que cirncunstancialmente se reviste de carne para bajar a la tierra. ¿Cuántos famélicos niños en el Sahel no tendrÃan vida y futuro con lo que se ha invertido buscando un cadáver ya descompuesto? No serÃamos estos cuerpos, serÃamos infinidad de cuerpos que la Madre Tierra, Amalurra, nos irÃa prestando para nuestra carrera evolutiva. No serÃamos estos cuerpos que abandonaremos en los cementerios, junto a la cruz de una alta montaña, que dejaremos en Ãnfimas cenizas ascender a los cielos, que se perderán entre el hedor de una escombrera... Necesitamos también grandes palas y escavadoras para remover nuestra granÃtica cultura de la desesperanza y el "acabose"; para dar con el brillante filón de una emancipadora eternidad, con el verdadero hallazgo de un amor que nunca, nunca se acaba. Aferrarnos a lo material sólo comporta su cuota de dolor inagotable. No serÃamos estos cuerpos, pero mientras que lo sigamos asà creyendo, seguiremos penando y removiendo en balde ingentes toneladas de basura. No descansan nuestros seres queridos junto a nosotros porque tengamos una tumba cercana suya adornada de frescas flores, sino porque su recuerdo vivo de amor perdura sin tiempo en nuestro interior. No es tanto dónde arrodillarnos, sino cómo, cuándo y dónde seguir su ejemplo. La vela que toca alimentar es sobre todo la del altar de nuestros corazones. Ella no urge de frÃo mármol para posarse. ¡Descanse en paz JoaquÃn Beltrán con los perfumes de gloria que de seguro mereció, lejos de los barros y deshechos de este mundo¡ Artaza 17 de Mayo de 2021 |
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